Muchas gracias Dios mío por regalarme no sólo un año más de vida, sino de grandes lecciones...
Hoy echo una mirada atrás, y no puedo más que agradecer por todo lo que he vivido. Más allá de cualquier tristeza o dificultad, me has bendecido con mi familia, mis amigos, y con todas esas personas que he tenido la fortuna de conocer a lo largo de este caminar, y que han hecho mi paso por este mundo, mucho más agradable.
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| Festejo de cumpleaños CEC |
En mí no hay arrepentimientos, pues creo que viví lo que tenía que haber vivido para llegar a ser lo que soy al día de hoy. Este día, segura, puedo pararme frente al espejo y mirar a los ojos a la mujer que muestra mi reflejo; satisfecha conmigo misma por haber conseguido lo que algún día visualicé.
Gracias por permitirme entender que mis penas no eran más que mis sueños infantiles que se estaban desvaneciendo con los años; me permitiste rescatar y sanar a esa niña que hoy ha crecido para convertirse en una mujer completa, ahora capaz de dar y de recibir amor.
He entendido que no podemos cambiar a las personas, ni cambiar sus decisiones, sólo podemos amarlas, y aun cuando el amor no sea devuelto no está perdido, ya que si no es recíproco este regresara a nosotros para sanar nuestro corazón.
Ya no hay lugar para las penas, pues has sido tan generoso que, aún en las dificultades siempre has murmurado en mis oídos tus bendiciones, para hacerme saber que estás ahí, conmigo. Vienen muchos días por delante pero, hoy elijo vivir feliz y agradecida porque sé que, soy tu milagro. ¡Mereces lo que sueñas!
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