Resiste corazón, resiste. La vida avanza, siempre nos trae sorpresas, no te preocupes tu eres capaz de seguir. No lo dudes, la felicidad también esta hecha para ti. ¿Recuerdas los colores? Hoy simplemente hubo otros que tus ojos no pudieron ver, pero estaba ahí.
¿Alguna vez has sentido que tu vida va bien y que de pronto se detiene, golpeándote de forma que sientes perder por segundos el equilibrio? Hoy lo sentí. Hoy sentí eso que podría llamar seguridad a medias, eso que cuando recuerdas no sabes si fue real o efímero, eso que parece ser una necesidad y es simplemente un inmenso cariño, eso que confunde y aún te omite respuestas, eso que te causa tantas dudas y te mantiene en silencio, eso que deseas con ansias y te parece inalcanzable, eso que crees tener ahí y en un abrir y cerrar de ojos se vuelve distante, eso que te llena de alegría y después te produce una gran tristeza, eso que es tu presente pero te hace sentir en el pasado, eso que quisieras cambiar y no sabes cómo, eso que quieres gritar y llorar pero se ahoga ahí. Ahí, en ese lugar que cada día de tu vida ha hecho que llenes de seguros y cadenas, donde has acumulado tantas cosas que sientes que ahora te aprieta, te encierra en tu propio mundo, el mundo que te has creado, para soñar, para planear, para crear, y ¿crear qué?, ¿tú cárcel o el paraíso que no sabes si llegará?.
No sé que me pasa pero intento conocerlo. Aunque posiblemente lo sé, en el fondo de mis pensamientos y sentimientos, lo sé. Me pregunto, en que momento podré aceptar, lo que siento por ti. No sé si te quiero, creo que te amo. Creo que podría hacer mil cosas por ti, pero dudo que tu te des cuenta de lo que hago y mis intentos por hacerte un poquito feliz. Pero no quiero, no quiero ser solo yo, no quiero sentirme sola en este intento, no quiero necesitarte, no quiero entregarme, sintiendo que tu no estas dispuesto a dar mas, mas de lo indispensable… pero aún así, lo hago.
Todos sabemos que la vida es un sube y baja, que por momentos avanza en una armonía sin mas, sin embargo, quisiera juntar cada uno de los momentos que me has hecho tan feliz y repetirlos para sentirte cerca de mí. Las primeras palabras que denotaban que había algo, el primer contacto, los primeros intentos por estar cerca, el primer beso, la primera salida, tu primera dotación sin fin de afecto, dormir contigo, compartir aquél momento, tu compañía cada día, tus risas… tú.
¿Alguna vez has sentido que tu vida va bien y que de pronto se detiene, golpeándote de forma que sientes perder por segundos el equilibrio? Hoy lo sentí. Hoy sentí eso que podría llamar seguridad a medias, eso que cuando recuerdas no sabes si fue real o efímero, eso que parece ser una necesidad y es simplemente un inmenso cariño, eso que confunde y aún te omite respuestas, eso que te causa tantas dudas y te mantiene en silencio, eso que deseas con ansias y te parece inalcanzable, eso que crees tener ahí y en un abrir y cerrar de ojos se vuelve distante, eso que te llena de alegría y después te produce una gran tristeza, eso que es tu presente pero te hace sentir en el pasado, eso que quisieras cambiar y no sabes cómo, eso que quieres gritar y llorar pero se ahoga ahí. Ahí, en ese lugar que cada día de tu vida ha hecho que llenes de seguros y cadenas, donde has acumulado tantas cosas que sientes que ahora te aprieta, te encierra en tu propio mundo, el mundo que te has creado, para soñar, para planear, para crear, y ¿crear qué?, ¿tú cárcel o el paraíso que no sabes si llegará?.
No sé que me pasa pero intento conocerlo. Aunque posiblemente lo sé, en el fondo de mis pensamientos y sentimientos, lo sé. Me pregunto, en que momento podré aceptar, lo que siento por ti. No sé si te quiero, creo que te amo. Creo que podría hacer mil cosas por ti, pero dudo que tu te des cuenta de lo que hago y mis intentos por hacerte un poquito feliz. Pero no quiero, no quiero ser solo yo, no quiero sentirme sola en este intento, no quiero necesitarte, no quiero entregarme, sintiendo que tu no estas dispuesto a dar mas, mas de lo indispensable… pero aún así, lo hago.
Todos sabemos que la vida es un sube y baja, que por momentos avanza en una armonía sin mas, sin embargo, quisiera juntar cada uno de los momentos que me has hecho tan feliz y repetirlos para sentirte cerca de mí. Las primeras palabras que denotaban que había algo, el primer contacto, los primeros intentos por estar cerca, el primer beso, la primera salida, tu primera dotación sin fin de afecto, dormir contigo, compartir aquél momento, tu compañía cada día, tus risas… tú.
En algún momento entenderás la necesidad que tenía de expresarte lo que siento y de pedirte que estuvieras junto a mí. Hoy no, mañana quizás si.
Eso… eso era amor. Y, valió la pena.
Sólo espero que el día que no esté, me extrañe y le haga tanta falta como, él a mí. Gracias por los momentos que se han cumplido y por la esperanza en momentos que están por venir.
